Velados por el Gobierno

Nadie sabe a donde vamos a llegar. España, ese lugar donde residimos tantas personas orgullosas de sentirse españoles, miramos cada vez más las contrariedades que sufre nuestro querido país. Y sin decantarme por ningún partido político, ya que, éstos solo luchan por conseguir votos en las próximas elecciones. Y digo esto porque voy a darles mi visión de varias acciones erróneas que para mi está realizando el gobierno.

Queremos ser un país libre, heterogéneo, cosmopolita, un país ejemplo y lo único que estamos consiguiendo es ser el hazme reír de la sociedad. De la propia sociedad española. Sumergidos en una crisis, donde no se ponen soluciones. Bueno sí, subir el I.V.A. con la consiguiente subida de precios. Realmente a veces me pregunto, sí se piensas las cosas antes de publicarlas. Y digo esto por esa propuesta que hizo nuestra querida ministra sobre una asignatura troncal y obligatoria sobre orígenes del Feminismo. Y digo yo, ¿no dice su gobierno que hay que ser iguales? Que hasta tenemos un ministerio de Igualdad, ¿para algo servirá no? También hemos tenido a debate la “famosa” ley del aborto. En la que una niña de apenas 16 años en plena adolescencia podía abortar sin preguntar siquiera a sus padres. Es decir, está prohibido fumar con 16 años y abortar no. Muy bien pensado, disfruto viendo que bien piensas las cosas desde nuestro querido gobierno. Y ya lo último, lo que ahora está de moda. La prohibición de un colegio de Madrid a que sus alumnos lleven algo sobre la cabeza. Sí, han leído bien, algo sobre su cabeza. Gorra, capucha, velo. No es una prohibición al velo islámico en sí sino una prohibición a cualquier prenda o cosa en la cabeza. Aún así, yo como cristiano estoy indignado. Mientras se retiran los crucifijos en los institutos y colegios de toda España con la mayor tranquilidad, nos echamos las manos a la cabeza porque un Colegio prohíba utilizar el velo islámico a una alumna. Y el debate está en el aire. ¿Crucifijos no y velo sí? Por querer sonreír a todo el mundo estamos dejando de lado nuestras tradiciones y cientos de años de historia. Para retirar los crucifijos se alega que debemos ser un país con libertad religiosa. Ahora por el asunto del velo, lo importante es la educación, no se tiene en cuenta la libertad de religión, “nos bajamos los pantalones” y no sabemos defender con autoridad nuestra historia. ¿Por qué? Porque somos el país de las contradicciones.